Desde hace años existe la creencia popular de que la carne está llena de antibióticos y hormonas que resultan perjudiciales para nuestra salud. Esta idea se reafirmó el año pasado después de que la ONU publicase en Twitter precisamente eso, causando un gran revuelo. Vamos, que la lió parda, pero ¿realmente contiene la carne antibióticos y hormonas y son estos un problema para nuestra salud? Vamos a ver ambos casos por separado:
¿La carne contiene antibióticos?
Los antibióticos sí se usan en ganadería, pero solo si es necesario. Lo cual es lógico porque si tienes un animal enfermo, querrás que se cure. Antes, los antibióticos sí que se utilizaban como medida preventiva y para acelerar el crecimiento y la producción pero esta práctica se prohibió hace décadas debido a la resistencia a ciertos antibióticos que estaban adquiriendo las bacterias. Así que, aunque hoy en día sí se utilizan, la OMS es muy rigurosa y se deben cumplir los siguientes puntos:
- Los antibióticos solo pueden suministrarse bajo supervisión veterinaria.
- No pueden utilizarse para estimular el crecimiento ni de manera preventiva en animales sanos.
- Hay que vacunar a los animales para disminuir las probabilidades de tener que usar un antibiótico y se utilizarán alternativas a estos siempre que sea posible.
Por lo tanto, sí se usan, pero solo en casos estrictamente necesarios. Sin embargo, estos antibióticos no llegan a la cadena de consumo del ser humano, como se suele decir. Tras haber tratado a un animal con antibióticos es obligatorio dejar pasar un tiempo determinado antes de sacrificarlo y destinar su carne al consumo para que el antibiótico desaparezca del organismo por completo y se tomarán muestras para analizarlas y comprobar que así es.
Así que no, en la carne que comemos no hay antibióticos. De hecho, la EFSA publica cada año los datos de las muestras que realizan y solo se han encontrado antibióticos en un porcentaje muy pequeño y se toman medidas al respecto para que no vuelva a ocurrir.
Por cierto, en la ganadería ecológica también se utilizan para estos casos, así que en este aspecto da igual comprar carne ecológica que no.
¿Contiene hormonas?
Esta era una práctica que hace años también se llevaba a cabo para engordar el ganado o que las vacas produjesen más leche, pero se prohibió su uso debido a sus posibles efectos perjudiciales para la salud. A día de hoy, el uso de hormonas para engordar ganado está prohibido en la Unión Europea (pero, por ejemplo, en Estados Unidos sí que está permitido su uso) y solo pueden utilizarse en casos estrictamente necesarios con fines terapéuticos y se ha de seguir el mismo protocolo que con los antibióticos: hacerlo con supervisión veterinaria y que pase un tiempo antes del sacrificio del animal para que elimine esas hormonas de su organismo. En estos casos la EFSA tampoco ha encontrado casos significativos de hormonas en carne.
Sí que es cierto que los animales producen hormonas de forma natural, igual que nosotros, pero las cantidades que podemos ingerir con el consumo de carne son demasiado pequeñas para que tengan ningún efecto sobre nuestro organismo.
Conclusión
Como ves, la carne ni contiene antibióticos, ni contiene hormonas. El uso de estos está restringido solo a cuando es necesario y se toman las medidas adecuadas para que estos no lleguen a nuestra cadena de consumo, así que puedes tomar carne con tranquilidad que ni te vas a hacer resistente a los antibióticos ni te va a crecer el pecho.
