marzo 3, 2020

Novedades y favoritos: febrero

¿A alguien más se le hizo eterno enero y ahora siente que febrero se le ha pasado volando? Porque yo no me creo que ya estemos en marzo, ¡en nada tenemos aquí el buen tiempo! Como ya hice en enero, vengo con una entrada más personal para comentar un poco las cosas interesantes que ha traído el mes de febrero (te adelanto que, como ya anuncié el mes pasado, sobre todo va de los Óscars).

Novedades

Para empezar, quiero darle las gracias a la youtuber Claudia Ayuso, porque preparó en uno de sus vídeos mi Pastel del pastor vegano y me ha disparado las visitas al blog. Y eso que le echó marmite…

Otro dato interesante es que hace un par de semanas me decidí por fin a pedir un Foam Roller por Amazon para tratar de deshacer algunas de las miles de contracturas que forman parte de mí, y tengo la fuerte corazonada de que, una vez pueda utilizarlo sin que se me salten las lágrimas, me daré cuenta de que es una de las mejores compras que he hecho en mi vida. Ahora solo falta que alguien invente uno pequeñito para la mandíbula. (Penny piensa que es algún tipo de juguete con el que aún no ha descubierto cómo se juega y siempre está expectante cuando lo uso).

Y después de ir a clases desde finales de agosto, este último fin de semana ‘las chicas del pádel’ nos animamos por fin a quedar para jugar un partido y el resultado fue cuanto menos interesante. Pero, oye, lo pasamos muy bien y las risas no faltaron. A ver si somos capaces de mantener la tradición.

Penny

También conocida como la reina del drama. He tenido que llevarla a vacunar dos veces este mes y ninguna de las dos ha fallado en montarme el paripé, como hace siempre; razón por la que ya nos conoce todo el mundo en la clínica a pesar de que no vamos tan a menudo. Para que te hagas una idea, mi conversación por teléfono para pedir hora fue tal que así:

–Hola, quería pedir cita para poner una vacuna.

–¿Cómo se llama el perro?

-Penny.

-Ah, *risa* entonces ya sé quién es.

Lo gracioso es que luego no da muestra de enterarse cuando la pinchan, así que no sé a qué viene el trauma, pero la cuestión es montar siempre el espectáculo (lo que le viene de familia, porque a mí con tres o cuatro años, una vez que mis padres nunca permitirán que olvide, me tuvieron que sujetar entre cuatro médicos para ponerme una vacuna). Aquí te dejo una foto de Penny en cuello en la sala de espera. La cara de susto lo dice todo…

Y lo prometido es deuda, así que vamos a hablar de…

¡LOS ÓSCARS!

Ponte cómodo porque tengo mucho que decir.

Voy a empezar por la mejor de las noticias: ¡Brad Pitt se llevó el Óscar! (ojo, que ya tenía uno como productor por 12 Años de Esclavitud).

Brad Pitt, además de ser un hombre que está muy por encima de la media, también es un actor espectacular. Desafortunadamente, nunca se le ha tomado demasiado en serio, a pesar de haber trabajado con algunos de los mejores directores de Hollywood. Por ello, que, después de pasarse los últimos años cogiendo papeles menos favorecedores físicamente para distanciarse de esa imagen de chico guapo y que por fin se le tomase como un actor de verdad, gane un Óscar por bordar un papel de tío guay de ‘mira cómo me quito la camiseta y le rompo la cara al hippy estando colocado’ con 56 años, me da la vida.

Dejando atrás a Brad Pitt… Estoy conforme con Parásitos ganando Mejor Película, pero a mí me habría gustado que repartiesen un poco los premios ya que, después de una temporada muy buena para 1917, al final se llevó poco, a pesar de ser un peliculón. Yo le habría dado Mejor Dirección.

Joaquin Phoenix, muy merecido el Óscar por su interpretación del Joker pero, aunque el mensaje de su discurso tenía muy buenas intenciones, creo que se le terminó yendo un poco la pinza. A nadie le parece bien que a una vaca la inseminen y la roben al ternero, pero no creo que sea un tema para discutir en los Óscars. De Renée Zellweger… la verdad, yo era más partidaria de Scarlett Johansson. Pero no podría estar más contenta por Laura Dern porque su interpretación en Historia de un matrimonio es tan perfecta como la Virgen María (si has visto la peli, entenderás el comentario).

Y todos sabemos que la canción que tenía que haber ganado era ‘Into the Unknown’ de Frozen 2, aunque no fuese de Elton John.

Ahora al lío porque ya dije en la entrada de enero que iba a sentirme muy indignada si Mujercitas no ganaba a Mejor Guión Adaptado y, como era de esperar, no lo hizo, en su lugar se lo llevó Jojo Rabbit. Pero lo que de verdad me irrita no es que no ganase, porque Jojo Rabbit también se merecía algún tipo de reconocimiento y era mi segunda opción, sino que la mayoría de la gente responda a esto con un “bueno, pero se llevó Mejor Vestuario”, como si tuviese que darse por satisfecha con eso.

Y no.

Antes de nada, voy a dejar claro que me alegro mucho de que se llevase el premio a vestuario porque se lo merecía pero, que la única peli ‘de chicas’ que había nominada, lo único que se lleve sea un premio por la ropa, es precisamente el mensaje opuesto de la película (si además incluimos que Bombshell, la única otra película con un cast predominantemente femenino, lo único que se llevó fue maquillaje, aunque también merecido, es ya para mear y no echar gota).

“Las mujeres tienen ambición, tienen talento, no solo belleza” le dice Jo March a su madre en una escena desgarradora interpretada a la perfección por Saoirse Ronan; pero para qué vamos a reconocer a la mujer que hay detrás de la cámara y de un guión brillante y maravilloso cuando podemos reconocer la ropa de las protagonistas o su físico, que eso sí lo valoramos (y si no, que se lo digan a la pobre Scarlett Johansson cada vez que en una rueda de prensa de Marvel tiene que aguantar que la pregunten por la dieta que ha tenido que seguir o si lleva ropa interior bajo el traje de Viuda Negra, mientras que a sus compañeros masculinos les hacen las preguntas decentes).

Ojo, que con todo esto no estoy diciendo que Mujercitas hubiese tenido que ganar todo solo por ser una película femenina. Este año había muchas películas buenísimas que se merecían lo que se han llevado. Lo que digo es que, precisamente por ser una película femenina, no se la ha reconocido lo suficiente y se ha tenido que conformar con Vestuario. Como mínimo se merecía una nominación a Mejor Dirección, pero claro, no vamos a dejar de nominar a los mismos hombres de siempre… lo que, a estas alturas, en mi opinión, es una vergüenza. Sobre todo teniendo en cuenta que ha tenido unas críticas espectaculares, mucho mejores que, por ejemplo, Joker, lo que no impidió que este liderase las nominaciones.

Vamos, que al parecer, a la gran mayoría le gustó Mujercitas, pero nadie está dispuesto a darle crédito. Y ahí tenemos un problema. Porque si ya de por sí estas películas no recaudan demasiado porque la mitad de la población las descarta por ser ‘de chicas’ (aunque aún no he encontrado un crítico masculino que la viese y no le gustase) y luego tampoco se las reconoce artísticamente, pues no se van a hacer más, porque Hollywood no es tonto y lo que le gusta es ganar dinero, no perderlo.

Y a mí, como mujer, qué quieres que te diga, me gusta verme representada de vez en cuando, lo que no disminuye mi apreciación por películas como El Señor de los Anillos, El Padrino o Rocky (qué sería de la industria del cine si las mujeres nos negásemos a ver cualquier película ‘de tíos’).

Y es que lo bonito del cine es toda la gran variedad que hay. Unos géneros nos pueden gustar más que otros, y siempre habrá películas buenas y películas malas, pero es cuestión de juzgar por su calidad y saber apreciar y reconocer esta, incluso cuando no somos el público objetivo.

Ya me callo.

Favoritos del mes

Algunos de mis favoritos siguen la misma línea porque a mí, como a Joaquin Phoenix, cuando algo me interesa, también se me va un poco la pinza:

Libro favorito: Catch and Kill (en español: Depredadores: el complot para silenciar a las víctimas de abuso) de Ronan Farrow, el reportero que destapó todos los abusos de Harvey Weinstein y que, curiosamente, es también el hijo de Woody Allen y Mia Farrow. En este libro relata cómo llevó a cabo la investigación y todos los obstáculos que se encontró por el camino, además de responder la gran pregunta: si todo el mundo parecía conocer los rumores, y mucha gente estaba al tanto de su comportamiento, ¿por qué pudo campar a sus anchas durante décadas?

Farrow explica cómo por medio de intimidaciones, amenazas y dinero (y estratagemas que parecen sacadas de un thriller de espionaje), los depredadores sexuales como Weinstein son capaces de silenciar a sus víctimas y a cualquiera que intente investigar sobre ellos y cómo se ayudan unos a otros para mantenerlo en silencio.

La cadena NBC, para la que Farrow trabajaba, le impidió continuar con el reportaje (luego se descubrió que muchos de los altos cargos también estaban involucrados en abusos) y, al negarse, le despidieron. Weinstein le puso espías, recibió amenazas, tuvo que dejar su apartamento, incluso le aconsejaron hacerse con una pistola…; y, aún así, continuó con su investigación por todas las mujeres a las que confiaba que ese artículo podría ayudar. Y por eso, Ronan Farrow se ha ganado mi completa admiración.

Película favorita: Bombshell (El Escándalo), siguiendo la temática anterior, esta peli trata las agresiones del presidente de la cadena Fox News, Roger Ailes, hacia sus empleadas y su posterior caída profesional cuando Gretchen Carlson (Nikole Kidman) lo denunció en 2016. Una representación dura y realista del acoso sexual al que algunas mujeres se ven sometidas en este tipo de entornos de trabajo y todo lo que conlleva, pero también de la ambición laboral; y la transformación de Charlize Theron en Megyn Kelly es impresionante (por eso se merecía Mejor Maquillaje).

Serie favorita: Los Medici (temporada 3) porque la política, conspiraciones, traiciones y los enfrentamientos entre las familias italianas te hace ver que Juego de Tronos, quitando los dragones y los caminantes blancos, no es tan ficticio como creías (no te encariñes con ningún personaje).

Las Chicas del Cable también estaría ahí arriba, pero no la voy a contar porque emitir solo media temporada es hacer trampa, además de muy cruel; y, aunque me gusta mucho la historia y la ambientación, le quito puntos por tener en Lidia a uno de los personajes protagonistas más insufribles de la historia de la televisión. Por suerte para la serie, las otras chicas son puro amor o sería infumable.