¿Por qué los ultraprocesados no son saludables?
El alto consumo de alimentos ultraprocesados en la actualidad es una de las principales razones por las que cada vez hay más casos de sobrepeso en el mundo. Hoy en día casi todos los alimentos que consumimos, en mayor o menor medida, están procesados; pero hay que distinguir entre procesos mecánicos y químicos. Son los alimentos que sufren procesos químicos los que se suelen catalogar como “alimentos ultraprocesados” y con los que debemos tener cuidado. Pero, exactamente, ¿por qué los ultraprocesados no son saludables?
Cereales de desayuno, galletas, margarinas, sopas instantáneas, caldos concentrados, hamburguesas, salchichas, patatas fritas de bolsa, salsas, zumos… Todos ellos son alimentos ultraprocesados que la mayoría de la gente consume con regularidad. Son muchas las razones por las que deberíamos evitar este tipo de productos en nuestra alimentación o, por lo menos, reducir su consumo lo máximo posible.
¿Por qué nos son saludables los productos ultraprocesados?
- Son bajos en fibra. La fibra ralentiza la absorción de los hidratos de carbono haciendo que estemos saciados durante más tiempo con menos calorías. Muchos alimentos ultraprocesados pierden la fibra alimentaria para que puedan ser congelados o simplemente durante el procesado.
- Son pobres en micronutrientes porque se van con la fibra. En muchos casos se añaden vitaminas y minerales sintéticos. Pero estos, además de que el contenido es menor, no son asimilados por el cuerpo de la misma forma que los naturales.
- Pueden ser ricos en grasas trans. Las grasas trans son aceites vegetales que se solidifican al añadirles hidrógeno. Son utilizadas para mejorar el sabor, la textura y la vida útil de los alimentos. Sin embargo, tienen efectos negativos sobre el colesterol, bajando el HDL y elevando el LDL. Debido a esto aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
- Son ricos en Omega-6 y pobres en Omega-3. Nuestra alimentación ya es más rica en Omega-6 que en Omega-3 debido a un alto consumo de aceite vegetales. Lo ideal es mantener con nuestra alimentación un buen ratio Omega-3/Omega-6. Estos dos ácidos grasos poliinsaturados compiten uno con otro por las mismas enzimas para ser metabolizados. Un ratio de Omega-6/Omega-3 causa inflamación y favorece la oxidación del LDL.
- Contienen muchos aditivos. Colorantes, conservantes, antioxidantes, emulsificantes, potenciadores del sabor, edulcorantes sintéticos… Estas sustancias sirven para incrementar el consumo, aportando cualidades innecesarias que solo sirven para que el fabricante pague menos por la elaboración de sus productos. La industria alimentaria se disculpa diciendo que “un poquito de estas sustancias no puede causar una enfermedad”. Sin embargo no nos dicen lo que nos puede producir en el organismo tomar constantemente un poquito de estas sustancias durante toda nuestra vida. Además, del hecho de que, que una sustancia sea inocua, no significa que no nos afecte de alguna forma.
- Alto contenido en sal. Tres cuartos de la sal que consumimos lo hacemos a través de alimentos ultraprocesados. Consumir más de 4,5 gr de sal al día puede dañar el estómago, causar pérdidas renales de calcio, aumentar el riesgo de presión arterial, agudizar las papilas gustativas y generar más apetito; lo que puede llevar a un aumento de peso.
- Alta cantidad de azúcar. En este tipo de alimentos se utiliza una gran cantidad de azúcar para aumentar la palatabilidad. Además de ser una fuente de calorías vacías, estas cantidades de azúcar pueden provocar resistencia a la insulina, un aumento de triglicéridos y del colesterol malo y acumulación de grasa en el hígado y abdomen. Todo esto puede provocar enfermedades de corazón, diabetes, obesidad y cáncer.
Todos estos químicos y añadidos hacen que los alimentos ultraprocesados sepan mejor y quieras comer más, ya que son muy gratificantes para el cerebro. Sin embargo, al hacer esto estamos comiendo más de lo que en realidad necesitamos. Lo que pone en riesgo nuestra salud. Además, a pesar de que son fáciles de comer y de digerir, causan adicción debido a que el consumo de estos alimentos hace que se libere dopamina, el mismo neurotransmisor que se ve afectado con el consumo de drogas.
Espero que todos estos datos te hayan ayudado a entender por qué los ultraprocesados no son saludables y por qué se recomienda limitar su consumo. A menudo, cuando se lleva una mala alimentación, no se debe tanto a los alimentos que no comemos, sino a los alimentos que sí y con sustituir estos por otros saludables, ya vamos a observar numerosos beneficios, tanto en peso como en salud.
Recuerda que lo principal para llevar una alimentación saludable es que esta esté formada por “alimentos reales”, es decir, materias primas, como pueden ser las verduras, la fruta, las legumbres, los frutos secos, carnes y pescados.